lunes, 22 de septiembre de 2008

LA BUROCRACIA Y EL MEDIO AMBIENTE


A muchos esto puede parecerles un detalle, o quizás un hecho de poca importancia, pero ¿alguien se ha preguntado recientemente cual es el costo ambiental de tanta burocracia que tenemos hoy en día en nuestro País?

Es decir, el hecho de que nuestra sociedad requiera tantos certificados, certificaciones y certificantes; sellos, comprobantes, etc. tiene una serie de costos.

O para decirlo de otro modo ¿cuanto papel se consume en estas cosas? ¿Cuál es el impacto ambiental futuro de todo esto?

Si cada persona que realiza trámites en el País necesita de un papel cualquiera para realizar un trámite en las diferentes instituciones, aproximadamente, Ud calcula y ¿cuánto se necesitaría?, para que se cumpla con todo lo que dispone la ley.

Si cada trámite que debemos hacer implica un gasto, aunque sea, de una hoja de papel que, tomado en el contexto de toda nuestra nación obligada a hacer un trámite determinado, causa un impacto ambiental, pues la cantidad de árboles que se necesita talar para producir semejante cantidad de papel es significativa."

¿Cuántos trámites más realizamos?
Si Ud desea desengañarse, realice los cálculos por su cuenta.

Mucha gente reserva una mañana cada semana para su papeleo personal, ir a los bancos, Ministerios, Hospitales, Municipalidades, etc.
Es decir, muchos realizan al menos un trámite por semana, lo que implica que cuando mínimo, y solamente en el País, se gastan unas 30 millones de hojas de papel en trámites burocráticos que no son productivos en sí, sino que simplemente sirven para llevar la formalidad legal de algo."
"Desde hace décadas mucha gente se queja de que las industrias y las actividades industriales, los vehículos, etc. contaminan el medio ambiente o, en definitiva, lo dañan o destruyen?
Esto es muy cierto, pero en el caso de la contaminación industrial al menos podemos decir que se está produciendo algo. Sin embargo, en le caso de esta "contaminación de papel" en realidad lo único que se produce son rumas de papeles para que los roedores y cucarachas lo empleen como sus aposentos.
A nadie le debe caber duda alguna de que nadie, absolutamente nadie en ningún lugar del planeta puede obtener algo relevante de una ruma de millones de hojas de papel por semana, y sobre todo, cuando hoy en día existen medios informatizados para hacer muchas cosas, y que bien se podría evitar todo esto.
La sociedad requiere de reglas de juego para manejarse, para subsistir y para progresar, así que una cantidad de trámites es inevitable, pero ello debería asumirse como un mal necesario que debe ser evitado en cuanta ocasión sea posible, y no como una simple cuestión.
La burocracia no es algo inocente, pues además de consumir el tiempo de la gente de manera improductiva, causa un descalabro ecológico sutil pero real y de gran magnitud.
Esto puede parecer a algunas personas una exageración, pero estamos hablando de millones y millones de hojas de papel consumidas inútilmente cada veinticuatro horas, lo que significa que hay que talar miles de árboles cada día, los cuales necesitan de varios años para crecer.
¿Todo esto es necesario para el medioambiente, ello significa que a fin de satisfacer la demanda de tantas hojas de papel habrá que plantar más árboles de rápido crecimiento fuera de las zonas naturales para ello, o en condiciones que no son las mejores para el medio ambiente pues, al fin y la cabo, la naturaleza hace que los bosques crezcan en determinados lugares y de determinada manera que, ciertamente, no coincide con semejante demanda de papeles.
El hecho es que hay algo que funciona mal en cualquier sociedad en la que una persona aislada del entorno natural puede tomar decisiones a la ligera que aparentemente pueden implicar la aparición de un papel o trámite más, pero que en la realidad afecta al medio ambiente a largo plazo y de manera bastante pronunciada.
Una de las razones para vivir en sociedad, y que esta tenga leyes y normas, es evitar los abusos de unos contra otros, pero parece ser que la propia estructura de la sociedad moderna está apañando precisamente ese tipo de conductas.

Todo esto no es más que un despilfarro, y los despilfarros se pagan, tarde o temprano."
A muchos esto puede parecerles un detalle, o quizás un hecho de poca importancia, pero ¿alguien se ha preguntado recientemente cual es el costo ambiental de tanta burocracia que tenemos hoy en día en nuestro País?

Es decir, el hecho de que nuestra sociedad requiera tantos certificados, certificaciones y certificantes; sellos, comprobantes, etc. tiene una serie de costos.
O para decirlo de otro modo ¿cuanto papel se consume en estas cosas? ¿Cuál es el impacto ambiental futuro de todo esto?

Si cada persona que realiza trámites en el País necesita de un papel cualquiera para realizar un trámite en las diferentes instituciones, aproximadamente, Ud calcula y ¿cuánto se necesitaría?, para que se cumpla con todo lo que dispone la ley.

Si cada trámite que debemos hacer implica un gasto, aunque sea, de una hoja de papel que, tomado en el contexto de toda nuestra nación obligada a hacer un trámite determinado, causa un impacto ambiental, pues la cantidad de árboles que se necesita talar para producir semejante cantidad de papel es significativa."

¿Cuántos trámites más realizamos?
Si Ud desea desengañarse, realice los cálculos por su cuenta.

Mucha gente reserva una mañana cada semana para su papeleo personal, ir a los bancos, Ministerios, Hospitales, Municipalidades, etc.

Es decir, muchos realizan al menos un trámite por semana, lo que implica que cuando mínimo, y solamente en el País, se gastan unas 30 millones de hojas de papel en trámites burocráticos que no son productivos en sí, sino que simplemente sirven para llevar la formalidad legal de algo."

"Desde hace décadas mucha gente se queja de que las industrias y las actividades industriales, los vehículos, etc. contaminan el medio ambiente o, en definitiva, lo dañan o destruyen?

Esto es muy cierto, pero en el caso de la contaminación industrial al menos podemos decir que se está produciendo algo. Sin embargo, en le caso de esta "contaminación de papel" en realidad lo único que se produce son rumas de papeles para que los roedores y cucarachas lo empleen como sus aposentos.

A nadie le debe caber duda alguna de que nadie, absolutamente nadie en ningún lugar del planeta puede obtener algo relevante de una ruma de millones de hojas de papel por semana, y sobre todo, cuando hoy en día existen medios informatizados para hacer muchas cosas, y que bien se podría evitar todo esto.

La sociedad requiere de reglas de juego para manejarse, para subsistir y para progresar, así que una cantidad de trámites es inevitable, pero ello debería asumirse como un mal necesario que debe ser evitado en cuanta ocasión sea posible, y no como una simple cuestión.

La burocracia no es algo inocente, pues además de consumir el tiempo de la gente de manera improductiva, causa un descalabro ecológico sutil pero real y de gran magnitud.

Esto puede parecer a algunas personas una exageración, pero estamos hablando de millones y millones de hojas de papel consumidas inútilmente cada veinticuatro horas, lo que significa que hay que talar miles de árboles cada día, los cuales necesitan de varios años para crecer.

¿Todo esto es necesario para el medioambiente, ello significa que a fin de satisfacer la demanda de tantas hojas de papel habrá que plantar más árboles de rápido crecimiento fuera de las zonas naturales para ello, o en condiciones que no son las mejores para el medio ambiente pues, al fin y la cabo, la naturaleza hace que los bosques crezcan en determinados lugares y de determinada manera que, ciertamente, no coincide con semejante demanda de papeles.

El hecho es que hay algo que funciona mal en cualquier sociedad en la que una persona aislada del entorno natural puede tomar decisiones a la ligera que aparentemente pueden implicar la aparición de un papel o trámite más, pero que en la realidad afecta al medio ambiente a largo plazo y de manera bastante pronunciada.

Una de las razones para vivir en sociedad, y que esta tenga leyes y normas, es evitar los abusos de unos contra otros, pero parece ser que la propia estructura de la sociedad moderna está apañando precisamente ese tipo de conductas.

Todo esto no es más que un despilfarro, y los despilfarros se pagan, tarde o temprano."

miércoles, 17 de septiembre de 2008

EL TURISMO RURAL COMO FUENTE DE INGRESOS EN LORETO

Ángela Ríos Cardozo*
Si supiéramos que el turismo rural ayuda a mejorar los ingresos de los agricultores; que crea empleo y hace que las familias permanezcan en sus chacras; que incorpora el trabajo de mujeres y jóvenes; que revaloriza el patrimonio gastronómico, antropológico, ambiental, cultural; que permite dar valor agregado y mejorar la comercialización de los productos agrícolas y forestales; que fomenta el asociativismo; que mejora la calidad de las producciones alimentarias regionales; que incorpora diversos establecimientos en los proyectos de desarrollo y, finalmente, que amplia la oferta turística, ¿no se atreverían los gobiernos a diseñar políticas específicas para atender a los productores involucrados? Que lo hagan y tendrán los votos a su favor, porque todas estas ventajas ofrece el turismo rural..
El turismo rural es el uso o aprovechamiento del entorno no urbano donde la población local es la proveedora de alimentos sanos y alojamiento cómodo con baños modernos a todos aquellos que buscan el contacto respetuoso con el entorno natural. Y en Loreto esta actividad podría asumir tantas modalidades como los agricultores puedan imaginar. He aquí algunos ejemplos:
Ecoturismo. El visitante se interna en el medio natural para educarse sobre las particularidades de cada ambiente al tiempo que disfruta de actividades en sitios no contaminados y puros. Miles de lugares en Loreto para hacer ecoturismo, desde los más cercanos como Allpahuayo-Mishana, hasta los más lejanos como Güepí.
Agroturismo. Los visitantes participan activamente de las actividades productivas, donde el productor agrario y su familia son los que atienden a los turistas. Cuántos no pagarían por ver la producción de aguardiente de caña o la cosecha y empaquetado de heliconias, sin contar con la recolección de sacha inchi o el camu camu.
Turismo de aventura. Utiliza el entorno para producir sensaciones de descubrimiento, como un río para canotaje, montañas para ciclismo, senderismo, y lo que la capacidad e imaginación de los propietarios puedan ofrecer.
Turismo deportivo. Los establecimientos agropecuarios pueden ser acomodados para la práctica de variados deportes como la pesca.
Turismo técnico científico. Atraer, por ejemplo a científicos interesados en la diversidad biológica de la selva baja.
Turismo educativo. Establecimiento de granjas educativas con la finalidad de recibir e instruir niños y jóvenes que cursan estudios desde los jardines de infancia hasta los colegios secundarios.
Turismo y seminarios, reuniones capacitación. En sitios cercanos a las ciudades se puede ofrecer servicios a las empresas para que organicen sus seminarios y reuniones de trabajo. También casamientos, aniversarios y todo tipo de reuniones sociales.
Turismo salud. Desde terapias psicológicas para eliminar el stress hasta tratamientos para personas con discapacidades motrices, SPA (Salute per Agua), Reiki (terapias que requieren de tranquilidad), etc.
Turismo gastronómico. Ofrece la propia producción convertida en manjares a los visitantes, con los cual se da mayor valor a la producción. Los turistas gastan más en alimentación y frecuentemente deciden su viaje en función de los alimentos de las regiones.
Turismo étnico. El que se realiza en comunidades indígenas, donde Loreto tiene grandes oportunidades al albergar la mayor población de las mismas.
Turismo cultural. Aprovecha la riqueza histórica que atesora el lugar. Se puede construir museos de sitios para hacer tangible los recursos culturales. Por que no un museo de la Cultura Omagua, en San Joaquín de Omaguas, primera ciudad fundada en Loreto.
Turismo en comunidades de recreación y retiro. Son grandes residencias para personas mayores que desean retirarse o para familias jóvenes con hijos que buscan climas templados-cálidos, costo de vida relativamente bajo, bajos impuestos locales, poca congestión, ambientes acuáticos no contaminados, etc.
Sin duda que el turismo rural puede convertirse en una gran herramienta de desarrollo local, pero para ser exitosa, las autoridades tienen que hacer promoción, capacitar y brindar asistencia técnica y financiera, principalmente. Sólo aquellos propietarios, comunidades, gobiernos locales y regionales que trabajen juntos pueden hacer del turismo rural una gran oportunidad y aprovechar ese 54 por ciento de visitantes extranjeros que actualmente llegan al Perú buscando naturaleza.
Tenemos que vencer los factores que actualmente vienen impidiendo el desarrollo de esta actividad como son: escasa conectividad aérea internacional, deficientes puertos e inadecuadas conexiones en los medios de transporte, precios no competitivos, escasa asociatividad, imágenes adversas en los consumidores, escasa capacitación, desconocimiento del valor turístico, y así podremos aprovechar todo el potencial que ofrece el entorno natural, el clima favorable, la cultura, la gastronomía y la hospitalidad de la gente loretana.

* Colaboración del presente artículo de una amiga la Licenciada en Administración con Maestría en Gestión Empresarial y Diplomada en Alta Dirección en Turismo Rural. Docente Universidad Particular de Iquitos (UPI), quién es una incansable promotora del Turismo vivencial ecológico en esta zona de la Amazonía

martes, 16 de septiembre de 2008

LA DIVERSIDAD BIOLÓGICA Y LA TRANSFORMACIÓN DE LA VIDA EN LA TIERRA


La vida sobre nuestro planeta es el resultado de más de 3.500 millones de años de evolución. La misma que ha sido configurado por fuerzas tales como el cambio de la corteza terrestre, las edades glaciales, el fuego y la interacción entre las especies.

En la actualidad nuestro planeta está siendo alterado por nosotros (los humanos). Desde el comienzo de la agricultura, hace unos 10,000 años, y hasta la revolución industrial de los últimos tres siglos, hemos modificado nuestros paisajes en una escala cada vez más grande e irreversible. De talar árboles con herramientas de piedra hemos llegado literalmente a mover montañas para extraer los recursos de la Tierra. Los antiguos métodos de recolección están siendo sustituidos por tecnologías transformadoras, a menudo sin ningún tipo de control que evite la sobre recolección. Por ejemplo, los recursos pesqueros que durante siglos vienen alimentando a nuestros pueblos estarán quedando agotados en unos pocos años por obra de flota de embarcaciones enormes, estas disponen una instrumentación que están orientados por radares las mismas que utilizan redes capaces de "engullir" una docena de aviones supersónicos en un momento. Al consumir una proporción cada vez mayor de los recursos naturales, estamos obteniendo una alimentación más abundante y mejores condiciones de vivienda, saneamiento y atención de salud, pero todo estos logros muchas veces están acompañados por una creciente degradación del medio ambiente, que puede traducirse luego en la degradación de las economías y la sociedad a la que sustenta.
Hasta el año 2000, la población del mundo llegó a los 6,000 millones de habitantes. Los expertos de las Naciones Unidas pronostican que el mundo deberá encontrar recursos para una población de 9,000 millones dentro de 50 años.
Nuestra demanda sobre los recursos naturales del planeta crece con una rapidez incluso mayor que las cifras indicadas; desde 1950, la población se ha duplicado, pero la economía global se ha quintuplicado. Además, los beneficios no se distribuyen equitativamente; en gran parte el crecimiento económico se ha limitado solo a algunos pocos países industrializados.
Al mismo tiempo, nuestros patrones de asentamiento están cambiando nuestras relaciones con el medio ambiente. Casi la mitad de la población mundial vive en pueblos y ciudades (migración acelerada del campo a la ciudad). Muchas personas perciben la naturaleza como algo que se encuentra distante a su vida cotidiana. Cada vez más las personas asocian los alimentos a los que se expenden en los super market, y se olvida a aquellos alimentos de origen natural.
El valor de la diversidad biológica
Los recursos biológicos son los pilares que sustentan las civilizaciones. Los productos de la naturaleza sirven de base a todas las industrias sea cual fuese su diversidad como la agricultura, químico, farmacéutica, la industria del papel, la horticultura, la construcción y el tratamiento de desechos. La pérdida de esta diversidad biológica amenaza nuestros suministros alimentarios, nuestras posibilidades de recreación, turismo, fuentes de madera, medicamentos y energía. Así mismo interfiere con las funciones ecológicas esenciales. Nuestra necesidad de aquellos componentes que nos proporciona la naturaleza de los cuales alguna vez hicimos caso omiso con frecuencia es importante e imprevisible. Cuando el peligro nos acecha recién pensamos en lo natural y volteamos nuestra mirada a nuestro gran almacén que es la naturaleza para curar nuestras enfermedades, algunas infusiones de genes resistentes procedentes de plantas silvestres, para salvar nuestros cultivos de las invasiones de plagas. Es más, la amplia gama de interacciones entre los diversos componentes de la diversidad biológica es lo que permite que el planeta pueda estar habitado por todas las especies, incluidos los seres humanos. Nuestra salud individual, y la salud de nuestra economía y de la sociedad humana, dependen del continuo suministro de los diversos servicios que nos brinda la naturaleza, y que serían sumamente costosos o imposibles de reemplazar. Estos servicios naturales son tan variados, y prácticamente infinitos. Por ejemplo, sería casi imposible sustituir, en gran medida, el control de plagas que cumplen diversas criaturas que integran la cadena alimentaria, o la polinización que llevan a cabo los insectos y las aves en su actividad cotidiana.
La bolsa de "bienes y servicios" prestados por los ecosistemas pueden mencionarse:
v El suministro de madera, combustible y fibra
v El suministro de vivienda y materiales de construcción
v La purificación del aire y el agua
v La descomposición de los desechos
v La estabilización y moderación del clima de la Tierra
v La moderación de las inundaciones, sequías, temperaturas extremas y fuerza del viento
v La generación y renovación de la fertilidad del suelo, incluido el ciclo de los nutrientes
v La polinización de las plantas.
v El control de plagas y enfermedades
v El mantenimiento de los recursos genéticos como contribución fundamental para las variedades de cultivos y razas de animales, los medicamentos y otros productos
v Los beneficios culturales y estéticos
v La capacidad de adaptación al cambio.

La diversidad biológica en peligro

Cuando la mayoría de las personas piensan en los peligros que acechan al mundo natural, en general evocan la amenaza a otras criaturas. La disminución en el número de animales tan representativos como el Cóndor de nuestros andes, el cocodrilo de nuestros manglares en tumbes, los pandas, los tigres, los elefantes, las ballenas y diversas especies de aves han atraído la atención mundial hacia el problema de las especies en peligro de extinción. Hay algunas especies que han estado desapareciendo a un ritmo entre 50 y 100 veces superior al ritmo natural, y se prevé que esto se intensifique de forma dramática. Sobre la base de las tendencias actuales, una cantidad estimada en 34,000 plantas y 5,200 especies animales, incluyendo que una de cada ocho especies de aves del mundo, estarían en peligro de extinción.

Durante miles de años hemos logrado una amplia gama de plantas y animales domesticados importantes para la alimentación. Pero esta reserva se está contrayendo a medida que la agricultura comercial moderna se centra en relativamente pocas variedades de cultivos. Además, el 30% de las variedades de las principales especies de animales de granja se encuentran actualmente expuestas a alto riesgo de extinción.

Si bien la pérdida de especies llama nuestra atención, la amenaza más grave a la diversidad biológica es la fragmentación, degradación y la pérdida directa de los bosques, humedales, arrecifes de coral y otros ecosistemas. Los bosques albergan gran parte de la diversidad biológica conocida en la Tierra, pero cerca del 45% de los bosques originales han desaparecido, como resultado de las talas emprendidas principalmente durante el siglo pasado. Pese a que ha habido cierta repoblación, los bosques de todo el mundo se siguen reduciendo rápidamente, especialmente en nuestra amazonia. Los manglares especialmente en el Departamento de Tumbes, un hábitat fundamental de cría de innumerables especies, están también en situación de vulnerabilidad, y la mitad de las especies ya han desaparecido.

Los cambios atmosféricos mundiales, por ejemplo, el agotamiento de la capa de ozono y el cambio climático, sólo agregan nuevas fuentes de presión. El debilitamiento de la capa de ozono permite que un mayor volumen de radiaciones ultravioletas B alcance la superficie de la Tierra, donde daña el tejido vivo. El calentamiento mundial ya está cambiando los hábitats y la distribución de las especies. Los científicos advierten que incluso un aumento de un grado en la temperatura mundial media, si se produce abruptamente, puede ser de serias consecuencias para muchas especies. Nuestros sistemas de producción alimentaria también podrían verse gravemente perturbados.

La pérdida de la diversidad biológica con frecuencia reduce la productividad de los ecosistemas y de esta manera disminuye la "bolsa" de bienes y servicios que nos ofrece la naturaleza, y de la cual sacamos provecho constantemente. Ello desestabiliza los ecosistemas y debilita su capacidad para hacer frente a los desastres naturales como inundaciones, sequías y huracanes y las presiones causadas por el hombre, por ejemplo, la contaminación y el cambio climático. Ya estamos gastando sumas enormes para intervenir en casos de daños de inundaciones y tormentas, exacerbados por la deforestación (La tala y quema del bosque amazónico es propiciado mayormente por la práctica de la agricultura migratoria, los cultivos ilícitos y otras actividades productivas. A 1990, de los 75 millones de Ha de bosque, se habían deforestado 7 millones; a una tasa de deforestación de 260 000 Ha/año), se prevé que estos daños han de aumentar debido al calentamiento global.

La reducción de la diversidad biológica también nos afecta de otras maneras. Nuestra identidad cultural está profundamente arraigada en nuestro entorno biológico. Las plantas y los animales son los símbolos de nuestro mundo, y están preservados en nuestra bandera, esculturas y otras imágenes que nos definen a nosotros y a nuestra sociedad. Extraemos nuestra inspiración simplemente mirando a nuestro alrededor la belleza y el poder de la naturaleza.

Si bien la pérdida de especies siempre ha ocurrido como un fenómeno natural, el ritmo de la extinción se ha acelerado de forma espectacular como resultado de la actividad humana. Los ecosistemas se están fragmentando o desapareciendo y numerosas especies están en disminución o ya extintas. Estamos forjando la mayor crisis de extinción desde el desastre natural que hizo desaparecer a los dinosaurios hace 65 millones de años. Esta extinción de especies es irreversible y, habida cuenta de nuestra dependencia en los cultivos alimentarios, los medicamentos y otros recursos biológicos, representa una amenaza para nuestro bienestar. Resulta temerario, sino directamente peligroso, atentar continuamente contra el sistema que sustenta nuestra vida. Además, es poco ético causar la extinción de otras formas de vida y, de esta manera, privar a las generaciones presentes y futuras de opciones para su supervivencia y desarrollo.

Los Glaciares y el Cambio Climático

De toda la región comprendida entre los trópicos en el mundo, la mayor superficie glaciar se encuentra en las montañas peruanas.

• Los cambios climáticos sus impactos y la gestión del recurso agua son las prioridades científicas del siglo XXI.

• Por su gran sensibilidad al cambio climático, los glaciares tropicales son excelentes indicadores de la evolución del clima.

• Tres capitales de América latina (Lima, La Paz y Quito) dependen en parte del agua de la fusión de los glaciares, y también los sectores agrícola, industrial, energético, etc.

• Según estudios científicos se ha determinado una reducción del área de la Cordillera Blanca durante 27 años (1962-1998) de 111,89 km2 (15.46%).

Nos preguntamos; ¿Podemos salvar los ecosistemas y con ellos las especies que apreciamos y otros millones de especies que, en algunos casos, pueden producir los alimentos y los medicamentos del mañana? La respuesta radicará en nuestra capacidad para armonizar nuestras demandas con la capacidad de la naturaleza para producir lo que necesitamos y absorber de forma inocua lo que desechamos.

lunes, 15 de septiembre de 2008

TURISMO AMBIENTAL



No he cometido ningún error gramatical o de redacción, al menos en el enunciado de este titular y como ya lo espero, no quiero decir ¿Por qué?, sino ¿Para qué?
Es cierto y está confirmado que nos encontramos en una situación de crisis y por tanto con una duración en el tiempo no determinada, que impacta directamente en la economía global y local, en el sector turístico (alojamientos, restauración, animación,..) y en el medio ambiente (con el impacto adicional del cambio climático, que no solo es consecuencia de, sino productor o inductor de).
Tanto hace un par de días, como hoy mismo escuchaba en la radio, varios comentarios de expertos en estas materias, que se pronunciaban de alguna forma, con un pensamiento similar o en la misma línea conceptual que la mía, lo cual siempre es muy agradable, ya que a uno le hace sentir, que no está solo pensando o analizando temas que otros no lo ven.
Pero en resumen, una crisis es parte de la vida y a la vez, provoca cambios, bien tangenciales, bien en profundidad, dependiendo de su nivel de impacto y de la reacción, de quien la padece. Estos cambios nos afectan a todos y nos pueden hundir, dañar o beneficiar, dependiendo de cómo sepamos y podamos reaccionar.
Pues bien, como Al Gore (Vicepresidente de EEUU y abanderado mundial ambiental), ya lo dijo en una presentación: nos encontramos en un período de grandes oportunidades de negocio ambiental. Y es totalmente cierto, cada vez se está abriendo mas este sector, que apenas esta arrancando y que tiene ramificaciones en otros sectores, que están totalmente influenciados, como es el turismo.
Por ejemplo, permítame insistir, ¿porque los turistas del norte de Europa con inviernos fríos y con primaveras y veranos lluviosos, venían al sur de Europa? Es obvio, que su motivación principal era aprovecharse de un clima benigno, con sol y calor garantizado. Pero, en estos últimos años y es la tendencia actual y venidera, el calentamiento del norte de Europa, está cambiando su clima de tal forma, que cada vez más, es más agradable, quedarse e incluso viajar a esos destinos, disminuyendo la motivación por el Sur. Ya estamos comenzando a pasar de la etapa de percepción de los turistas, por la de respuesta. Ahora es cuando la oferta turística, deberá también re-pensar y de alguna forma re-inventarse, para poder reaccionar a tiempo.
Si a esto le añadimos, los impactos económicos de la crisis, vemos como la capacidad de gasto de los consumidores disminuye y mas la percepción generalizada de la sociedad, que al no tener claro sus expectativas monetarias, restringe cada vez más sus gastos prescindibles. ¿¿Será la hora, de implementar el turismo, como una inversión, versus un gasto a nivel personal/ humano y social??También hay que tener en cuenta, como hoy mismo lo escuchaba en un programa radial, que ahora, otras empresas están incrementando bastante sus ventas, debido, precisamente a esta crisis (por ejemplo las agencias de trabajo temporal).
El Perú por su biodiversidad puede ser uno de los abanderados imagínense miles de turistas en Iquitos visitando todo el Amazonas, Quistococha, Los Boras, etc.. en Abancay visitando el Ampay, Choccequirao, Pachachaca,.. En Tumbes los Manglares etc... Lo que falta es una decisión del gobierno de implementar políticas ambientales y que nuestros burócratas realicen trabajos de Prospectiva e identifiquen herramientas y tecnologías emergentes que puedan lograr beneficios a la población.

Lo que es cierto es que una Crisis, puede servir, para replantear temas, proyectos, tabúes, ideas, sectores, etc…y por tanto genera nichos de oportunidad, que hay que saber identificarlos.
Y parafraseando, dichos y refranes, se puede aplicar uno de ellos muy al tono: No hay mal, que por bien no venga.