domingo, 29 de noviembre de 2009

NOS ACERCAMOS HACIA UN CATASTRÓFICO CALENTAMIENTO GLOBAL DE 6 ºC



El mundo se encuentra firme, rumbo hacia el peor de los escenarios posibles en lo que se refiere al cambio climático, con la media mundial de temperaturas subiendo hasta 6 ºC a finales de siglo, según advirtieron destacados científicos. Un crecimiento semejante, que sería mucho mayor en las zonas cercanas a los polos, tendría consecuencias catastróficas e irreversibles para la Tierra, volviendo inhabitables grandes zonas del planeta y amenazando la base de la civilización humana misma. Y nos encaminamos directamente a ello, según los científicos, porque las emisiones de dióxido de carbono de la industria, el transporte y la deforestación que son responsables del calentamiento de la atmósfera se han incrementado dramáticamente desde el 2002 de un modo que nadie había anticipado, y ahora nos acercamos al triple de la media anual de los noventa.

Esto significa que el peor de los escenarios posibles que preveía el último informe del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático de la ONU, publicado en 2007, es ahora hacia el que se dirige la sociedad, de acuerdo con 31 investigadores de siete países implicados en el Global Carbon Project, aunque se había especulado antes con el crecimiento de 6 ºC y sus desastrosos efectos, esta es la primera vez que los científicos han afirmado que la sociedad va camino de encontrarlo.

En los últimos meses se ha experimentado una rebaja de las esperanzas en la conferencia, no siendo la menor de las razones que los EE.UU. no estén dispuestos a recortar sus emisiones. Pero el presidente Barack Obama y el presidente de China Hu Jintao emitieron un comunicado conjunto tras una reunión en Pekín que alimentó nuevamente las esperanzas de que sea posible un acuerdo firme, después de todo.

No vendrá con la rapidez requerida, a juzgar por los resultados del estudio del Global Carbon Project Study, dirigido por la doctora Corinne Le Quéré, de la universidad de East Anglia y del British Antarctic Survey, que llegó a la conclusión de que ha habido un incremento del 29% en las emisiones de CO2 procedentes de combustibles fósiles entre el año 2000 y el 2008, el último año del que se disponen cifras.

Los investigadores han encontrado que hubo, de media, un incremento anual en las emisiones de más del 3% durante ese período, en comparación con el incremento anual del 1% entre 1990 y el 2000. La mayor parte del incremento de esta década ocurrió después del 2000 y tiene su origen en el boom de la economía china. Los investigadores prevén un ligero descenso este año debido a la recesión, pero incrementos aún mayores a partir de 2010.

En total, las emisiones de CO2 procedentes del uso de combustibles fósiles se han incrementado en un 41% entre 1990 y 2008, aunque las emisiones globales de 1990 son el nivel de referencia establecido por el Protocolo de Kyoto, con el cual los países están intentando reducir sus propias emisiones de carbono. El aumento de 6 ºC que se anticipa contrasta fuertemente con el crecimiento 'C' con el que toda la política medioambiental internacional, incluida la del Reino Unido y los EE.UU., espera estabilizar el calentamiento global, siendo los dos grados el umbral del cambio climático por el cual se pone en peligro la naturaleza y la sociedad.

Mientras tanto, los científicos han detectado por vez primera un fallo en la habilidad natural de la Tierra para absorber el dióxido de carbono que los hombres emiten a la atmósfera. Encontraron pruebas significativas de que hay mayores cantidades de CO2 en la atmósfera, exacerbando el efecto invernadero debido a que los “sumideros de carbón” natural que lo habían absorbido durante décadas en tierra y mar están empezando a fallar, posiblemente como resultado del aumento de las temperaturas.

La cantidad de CO2 que ha permanecido en la atmósfera como resultado de todo ello se ha incrementado en un 40% en 1990 a un 45% en el 2008. Esto sugiere que los espacios que absorbían el carbón están comenzando a fallar. La profesora Le Quéré puso énfasis en que existen aún muchas dudas respecto a los “sumideros de carbón”, como la habilidad de los océanos para absorber el CO2 disuelto, pero que todas las pruebas sugieren que hay ahora un ciclo de “respuestas positivas” allí donde las emisiones de dióxido de carbono en aumento conducen a temperaturas crecientes y un aumento en correspondencia del dióxido de carbono en la atmósfera.

El estudio también ha encontrado que por vez primera desde los sesenta, la combustión de carbón ha superado la de petróleo como fuente principal de las emisiones de dióxido de carbono producidas por combustibles fósiles. Buena parte de este carbón se empleó en China para producir bienes que se venden a Occidente (los científicos estiman que el 45% de las emisiones chinas son producto de la manufactura de productos que son vendidos fuera del país). Es claro que China, habiendo superado a los EE.UU. como el mayor emisor de carbono, será central en cualquier acuerdo climático, y en ese sentido el comunicado de los líderes chino y estadounidense fue interpretada como una señal de que un progreso puede ser posible en la capital danesa el mes próximo.

UN CRECIMIENTO DE 6 ºC: LAS CONSECUENCIAS
Si dos grados son los aceptados generalmente como el umbral para un cambio climático peligroso, uno de seis grados en la media de las temperaturas mundiales deberá ser sin duda aún mucho más peligroso, escribe Michael McCarthy. Hasta qué punto, lo advirtió en el 2007 el divulgador científico Mark Lynas, que reunió todas las investigaciones científicas disponibles para dibujar un paisaje del mundo en el que las temperaturas superasen en tres el límite de peligrosidad.

Su veredicto fue que un crecimiento de las temperaturas de esta magnitud “catapultaría el planeta a un estado invernadero extremo como no se ha visto en casi 100 millones de años, cuando los dinosaurios pastaban en bosques polares y los desiertos se extendían hasta el corazón de Europa.”
“Causaría continúa la extinción en masa de prácticamente toda la vida animal existente y probablemente reduciría a la humanidad a un pequeño grupo de supervivientes en liza contra el entorno y entre ellos mismos por sobrevivir cerca de los polos.”

Muy pocas especies animales se adaptarían a tiempo a un cambio climático tan abrupto, sugiere. “Con los trópicos siendo demasiado cálidos como para albergar plantaciones, y los subtrópicos demasiado secos, miles de millones de personas se encontrarían en vastas zonas del planeta básicamente inhabitables. Esto probablemente incluyera incluso el sur de Europa, a medida que el desierto del Sahara vaya cruzando lentamente el Mediterráneo.”
“A medida que los casquetes polares se fundan, cientos de millones de personas se verán forzadas a desplazarse al interior debido al rápido crecimiento de las aguas. Cuando las reservas de comida decaigan, las zonas más elevadas de las latitudes medias y las regiones subpolares se convertirán en refugios disputados.”
“Las islas del Reino Unido puede que se conviertan en unas de las propiedades inmobiliarias más deseadas del planeta. Pero con un par de miles de millones de personas llamando a nuestras puertas, las cosas podrían ponerse verdaderamente feas.”

domingo, 22 de noviembre de 2009

FUMAR ES DAÑINO PARA LA SALUD



El cigarro siempre ha sido adulterado por los fabricantes a fin de multiplicar los efectos de la adicción.

Los cigarrillos modernos tienen mucho más que tabaco. Contienen, por ejemplo, nicotina, una droga altamente adictiva y que se encuentra en forma natural en la planta del tabaco. Esta droga se maneja con mucha precisión para aumentar su adicción, además se mezclan cientos de aditivos que van desde endulzantes hasta compuestos amoniacales, todo esto, casi siempre, sin controles gubernamentales, ni pruebas de laboratorios, reportes o vigilancia. Aunque las compañías tabacaleras por lo general alegan que muchos de los aditivos que usan están aprobados para el consumo humano, no mencionan que al someterlos a altas temperaturas, las propiedades químicas de los mismos se alteran, haciéndolos en consecuencia, potencialmente tóxicos y/o activos desde el punto de vista farmacológico.

Prácticamente la totalidad del consumo actual se realiza mediante la inhalación de la combustión de los productos del tabaco. En el extremo del cigarrillo que se está quemando se alcanzan temperaturas próximas a los 1000 ºC, lo que transforma numerosos componentes originales de la planta y genera complejas reacciones químicas que dificultan la identificación completa de todas las sustancias que existen o se generan en el proceso de fumar.

Las temperaturas que alcanza un cigarro, además de alterar químicamente ciertos componentes del tabaco, lesionan seriamente el sistema respiratorio.

Hasta ahora se han reconocido cerca de 5.000 elementos químicos tanto en la fase gaseosa como en la sólida o de partículas del humo del tabaco. Es bastante diferente la composición de la corriente principal que aspira el fumador y la secundaria que se escapa del cigarrillo al ambiente. Muchas sustancias nocivas presentes en el humo están más concentradas en esta corriente secundaria (monóxido y dióxido de carbono, amoniaco, benceno, benzopireno, anilina, acroleína y otros muchos), lo que incrementa la toxicidad de la atmósfera que genera.

Te invitamos a conocer las tablas con los niveles de unos pocos componentes de un cigarro. Además, aquí te desarrollamos los efectos y características de sólo algunos de los componentes de un cigarro:

NICOTINA
La nicotina de las hojas de tabaco es el principal ingrediente adictivo de los cigarrillos. Se deposita en los pulmones del fumador en forma de una potente mezcla de partículas y gases. La nicotina es rápidamente absorbida en la sangre y llega al cerebro aproximadamente en 10 segundos. Es en este punto en el que los receptores cerebrales producen la sustancia química denominada dopamina. Según los estudios realizados, se ha detectado nicotina en fumadores en todos los tejidos del cuerpo, incluso en la leche materna.

El cerebro se habitúa rápidamente a recibir dosis regulares de nicotina y a sufrir síntomas de abstinencia cuando dicho suministro se interrumpe. Por otro lado, la nicotina estimula el sistema nervioso central, incrementando el ritmo cardíaco y la presión arterial, lo que produce un mayor consumo de oxígeno.

Este estímulo nervioso se plasma en un aumento del metabolismo del organismo, afectando a la nutrición del fumador, pues se comporta como un anoréxico, disminuyendo la sensación de hambre y estimula la secreción de la adrenalina.


DIÓXIDO DE CARBONO Y MONÓXIDO DE CARBONO

El monóxido de carbono es un gas incoloro de elevado poder tóxico que se desprende durante la combustión del tabaco y el papel del cigarrillo. Constituye del 3 al 6% del humo inhalado.

El aire tiene una concentración de 1 a 30 partículas de monóxido de carbono por millón (p.p.m.), los escapes de los automóviles las elevan de 30 a 800 (p.p.m.).

En comparación con en CO de una ciudad y su polución generada por industrias y coches, el monóxido de carbono del cigarro incide más destructivamente en el organismo porque el humo entra en su totalidad en el sistema respiratorio. El nivel de CO del humo de un cigarro es similar al de una gran ciudad con mucha contaminación:

Una de las particularidades más peligrosas consiste en que la hemoglobina es 250 veces más ávida de CO (monóxido de carbono) que de O2 (oxígeno), produciendo el compuesto de carboxihemoglobina en la sangre.

Las temperaturas que alcanza un cigarro, además de alterar químicamente ciertos componentes del tabaco, lesionan seriamente el sistema respiratorio
El CO interfiere en el transporte del oxígeno por la sangre y su depósito en los tejidos, lo que produce hipoxia, agravando la vasoconstricción causada por la nicotina.

El dióxido de carbono se aferra, también, a la hemoglobina en la sangre con más facilidad que el oxígeno. Esto hace que la sangre transporte menos oxígeno por todo el cuerpo, lo que aumenta el riesgo de trombosis.


ALQUITRÁN

El alquitrán es un término colectivo que se utiliza para miles de sustancias químicas que se desprenden en el humo del cigarrillo, incluidos el arsénico y el cianuro. Asimismo, el alquitrán es la sustancia amarillenta y pegajosa que mancha los dientes y dedos de los fumadores, depositándose asimismo en los pulmones.


Fumar entre 20 y 60 cigarrillos diarios, ya sean normales o bajos en alquitrán, provoca una acumulación anual de alquitrán en los pulmones cercana a los 500 gramos. Dicha sustancia es la responsable de la mayoría de las lesiones pulmonares provocadas por el tabaco a los fumadores.


GAS CIANHÍDRICO

El humo visible es tan sólo el 5-8% del total de lo que se produce al consumir cigarrillos. El resto está compuesto de gases invisibles, entre los que se incluye el gas cianhídrico. Este gas venenoso también reduce la capacidad del organismo para transportar oxígeno. Otro de los gases invisibles, la nitrosamina, daña las células de los tejidos y puede producir tumores malignos. El humo de los cigarrillos también contiene sustancias que pueden producir mutaciones genéticas que se han relacionado con el cáncer de pulmón

AMONIO

El amonio se utiliza para cristalizar la nicotina, un proceso similar al que se hace para convertir el polvo de cocaína en crack. El amonio acelera la dispersión de la nicotina cristalizada al aumentar el pH (la alcalinidad) del humo del tabaco, lo que modifica la composición química de la nicotina con el fin de que sea más rápidamente absorbida por el organismo. El objetivo es potenciar el efecto de la nicotina.


AZÚCAR

El aditivo más común del tabaco es el azúcar en sus diferentes modalidades. El azúcar representa en torno al 3% del peso total de un cigarrillo. Cuando se enciende un cigarrillo, los azúcares empiezan a arder y producen una sustancia química denominada acetaldehído, que refuerza el efecto adictivo de la nicotina.

SALES DE ÁCIDOS ORGÁNICOS

CACAO


El cacao contiene una sustancia química llamada teobromina, que potencia la dilatación de las vías respiratorias. Este efecto broncodilatador hace que el fumador respire con mayor profundidad de manera que las caladas contengan mayor cantidad de humo y nicotina. También puede añadirse mantequilla de cacao, pues se piensa que disminuye la aspereza del humo y crea, tal y como dijimos anteriormente, una experiencia mucho más suave al fumador.

PIRIDINA

La piridina actúa como un depresor del sistema nervioso central. Funciona al igual que la nicotina con el fin de potenciar los efectos adictivos de fumar.

CHOCOLATE Y MIEL
Aromatizantes como el chocolate y la miel ayudan a disimular el amargor de la nicotina. El sabor dulce hace que el cigarrillo sea más agradable para el fumador.


MENTA

Sin los aditivos, el humo del tabaco no sólo sabe mal, sino que es extremadamente irritante para la garganta. El mentol adormece la garganta de manera que el fumador no pueda sentir el efecto abrasivo del humo. De este modo, la reacción natural del cuerpo ante una sustancia irritante queda anulada.

REGALIZ

Al igual que el chocolate y la miel, el regaliz es uno de los aromatizantes más efectivos en los cigarrillos. Según la BAT, la Asociación Británica de Productores de Tabaco, el regaliz produce una nota de sabor dulce que refuerza la calidad final del producto.

Esta droga se maneja con mucha precisión para aumentar su adicción
Dichos potenciadores cualitativos del sabor juegan un papel vital en el enmascaramiento del mal sabor del tabaco de mala calidad. El regaliz también dilata las vías respiratorias, ayudando al fumador a aspirar mayor cantidad de humo en una sola cala


RELLENO


Los cigarrillos contienen minúsculos trozos de hoja de tabaco, pero la mayoría del relleno proviene de los tallos y otros desechos de la hoja. Dichos rellenos, como hemos visto, son mezclados con agua, aromatizantes y otros aditivos. Algunas marcas tienen más relleno que otras siendo el cigarrillo menos denso cuanto más relleno contiene (en estos casos es menor la cantidad de nicotina desprendida).

PAPEL

El tipo de papel usado como cilindro del cigarrillo tiene efectos en la fuerza del mismo. Cuanto más poroso es el papel, más aire permite pasar para la combustión del cigarrillo, lo que diluye en mayor medida el humo. Este hecho también influye en la disminución de las cantidades de alquitrán y nicotina que son inhaladas.

FILTROS

Los filtros, hechos de acetato de celulosa, retienen parte del alquitrán y del humo antes de que éstos lleguen a los pulmones del fumador. Asimismo, también enfrían el humo y lo hacen más fácilmente inhalable. Los cigarrillos con filtro y bajos en alquitrán (con agujeros de ventilación en los laterales de los filtros) fueron desarrollados por la industria tabaquera con el objetivo de proteger la salud de los fumadores.

Nuevamente las tabacaleras mienten y las evidencias sugieren que los cigarrillos bajos en alquitrán no implican que el fumador inhale dosis más bajas de nicotina. Parece que los fumadores "compensan" dicho efecto de dilución de la nicotina mediante la inhalación más profunda o frecuente del humo.

Las últimas prácticas de las tabacaleras se encaminan a mejorar un sistema de micro-agujeros perforados en la zona del cigarro cercana al filtro. A través de estos agujeros cierta parte del humo quedaría liberado antes de ser inhalado por el fumador.

La realidad es otra: ponemos de manifiesto el verdadero motivo por el que se han diseñado los filtros con micro-agujeros de ventilación (completamente imperceptibles al ojo humano): al encontrarse cerca del filtro, gran parte de los agujeros son tapados por los dedos del fumador al sujetar el cigarrillo cuando da una calada, ello implica que éste inhale una dosis mucho mayor de las sustancias tóxicas del tabaco (pues los dedos impiden que ese humo salga por los agujeros).

Mientras tanto, las máquinas que certifican los niveles de toxicidad de un cigarro, se colocan de tal forma que dejan al descubierto la totalidad de los agujeros, liberando mucho más humo por éstos, que no queda registrado por la máquina. Es decir, los datos que se disponen en las cajetillas son falseados de esta manera por la industria tabacalera. Y, finalmente, el fumador queda expuesto a niveles mucho mayores de todas las sustancias cancerígenas que fuma.


Componentes del cigarrillo

La obtención de información acerca del contenido y efectos del tabaco siempre ha sido muy complicada. Las ocultistas tabacaleras siempre han puesto todo su empreño en boicotear cualquier estudio al respecto. Algunos expertos declaran que las artimañas de la industria tabaquera se encuentran bastantes años por delante del estudio médico en este campo.

Los fines para los que son añadidos ciertos compuestos son diversos, aunque suelen estar encaminados a ocultar los efectos del tabaco sobre el cuerpo humano o para potenciar la nicotina y resto de sustancias adictivas.

Aún así, las reacciones químicas producidas por la combustión del cigarro hacen muy complicado detectar las más de 4000 sustancias que se encuentran en un pitillo, y las más de 400 tóxicas y cancerígenas.

sábado, 14 de noviembre de 2009

¿CONFLICTO VIOLENTO POR EL AGUA EN EL FUTURO?


Al entrar en el siglo XXI están emergiendo nuevos retos en estas áreas. Nos enfrentamos con amenazas antiguas y nuevas a la paz y la seguridad internacional; la pobreza ha sido reconocida como el más grande de todos los problemas con los que se enfrenta el mundo en el nuevo siglo; y valores fundamentales de libertad, igualdad, solidaridad, tolerancia, respeto por la naturaleza y responsabilidad compartida ahora forman valores comunes a través de los cuales es posible lograr éxitos en las primeras dos categorías. En cada una de estas áreas clave, el medio ambiente y los recursos juegan un papel central. Las amenazas a la seguridad común incluyen ahora las llamadas “amenazas blandas": degradación del medio ambiente, agotamiento de los recursos, enfermedades contagiosas y corrupción, para nombrar sólo unas pocas.

Históricamente, hay pocas pruebas de que la escasez de agua haya causado conflictos violentos, aunque es cierto que, en muchos casos, el agua se ha usado como un objetivo o una meta estratégica, como parte de actividades militares. Sin embargo, ya hubo muchas disputas sobre el agua dentro de naciones: es posible que la probabilidad de conflicto violento por el agua varíe inversamente al tamaño (y tipo) de los órganos políticos involucrados.

Pero la seguridad de agua figurará en un lugar prominente en la agenda internacional durante décadas por venir. En algunos casos, el agua hasta podría ser un factor contribuyente en un conflicto internacional. El Profesor de Hidrología Uri Shamir, uno de los miembros del equipo de negociación israelí del Proceso para la Paz en Medio Oriente, observó cierta vez: “Si existe voluntad para la paz, el agua no será un impedimento. Si se desean razones para luchar, el agua ofrecerá amplias oportunidades”

La escasez de agua es una función de suministro y demanda. La demanda está aumentando a un ritmo alarmante en algunas regiones, debido al crecimiento de la población y al creciente uso per capita. En muchos países en que el agua es escasa, como Jordania e Israel, no existe manera obvia y económica de aumentar el suministro de agua y por ende es probable que resulten tensiones entre diferentes usuarios de agua. En otros países, como Egipto, las mejoras en el uso eficiente del agua, el evitar cultivos de alto consumo de agua, o la importación de agua de países cercanos podrían ofrecer soluciones razonables.

El deterioro de la calidad del agua. La agricultura es el contaminador más grande: el mayor uso de fertilizantes y pesticidas ha contaminado el agua subterránea así como el suministro de agua de superficie. La contaminación doméstica e industrial también está aumentando, y el problema afecta tanto a países desarrollados como en desarrollo.

Por último, el uso de agua tiene una dimensión geopolítica. El agua corre de los usuarios de corriente arriba a los usuarios corrientes abajo, y su retirada y su tipo de uso en una parte pueden afectar la cantidad o la calidad de los suministros corriente abajo. Por otra parte, también hay aspectos históricos, culturales, económicos y sociales en el uso del agua. Para algunos, el agua es un regalo de Dios, al cual no debe ponerse precio, mientras que otros, tales como el Banco Mundial, han ejercido presión para poner un precio total al costo marginal sobre el agua.

Los problemas de escasez de agua y contaminación del agua afectan a la salud humana así como a la del ecosistema, y obstaculizan el desarrollo económico y agrícola. Los problemas locales y regionales, a su vez, pueden afectar al resto del mundo al amenazar los suministros de alimentos y el desarrollo económico mundial. La Comisión de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible concluye que estos problemas podrían resultar en una serie de crisis de agua locales y regionales, con serias implicaciones mundiales.

¿Acaso es probable que se produzca un conflicto violento por el agua en el futuro? La experiencia del pasado sugiere que esto es poco probable. No obstante, muchos aseguran que la probabilidad de conflicto está aumentando. La base para la mayoría de las proyecciones para futuros conflictos es que, con el aumento de la demanda, la disminución de la disponibilidad de agua dulce (por minería y contaminación de agua subterránea), y los efectos adversos sobre la salud, debidos al agua de mala calidad, la escasez resultará en violencia y guerras por el agua. Sin embargo, luchar por el agua tiene poco sentido económica y políticamente.
Hay poca duda de que la escasez de agua constituirá un problema en algunas regiones en el futuro. Es probable que el calentamiento de la Tierra altere las pautas de las precipitaciones y los regímenes de evapo-transpiración en muchas regiones y el planeamiento a largo plazo para el suministro de agua debe tener esto en cuenta. Tampoco se duda que haya la posibilidad de que el agua encarezca a medida que se vaya haciendo más escasa. Esto requerirá que se introduzcan mejoras en la eficiencia del uso del agua -- y posiblemente la reestructuración de economías lejos de los sectores de alto consumo de agua.

“Si existe voluntad para la paz, el agua no será un impedimento. Si se desean razones para luchar, el agua ofrecerá amplias oportunidades”

ACTITUD HOSTIL CHILENA CONTRA EL PERÚ


Fuentes periodísticas han informado que el suboficial FAP Víctor Ariza Mendoza, quien en el 2002 trabajó en la agregaduría militar en la Embajada del Perú en Santiago de Chile —cuando probablemente fue captado por los servicios de inteligencia del vecino país—, ha venido espiando para ellos, recibiendo por su condenable traición a la patria sumas que al parecer oscilaban entre los cinco mil y ocho mil dólares mensuales.

Descubierto por la contrainteligencia FAP, fue detenido y Seguridad del Estado debe ponerlo a disposición del Ministerio Público para denunciarlo ante el Poder Judicial por su gravísimo delito. Este episodio crispa las ya difíciles relaciones con Chile.

Hasta ahora nuestra cancillería había procurado llevar por cuerda separada dos asuntos bilaterales: uno, el relacionado con el contencioso que se ventila en el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya, por la delimitación marítima; el otro, todo aquello que se enmarca en el ámbito de las relaciones empresariales de diversa índole, con importantes inversiones de Chile en el Perú.

Además, no se puede dejar de tomar en consideración la numerosa presencia de nuestros connacionales afincados en el país del sur. Precisamente estaba previsto que en los próximos días el presidente Alan García se entrevistara con su homóloga Michelle Bachelet, pues ambos asisten a la reunión del APEC, en Singapur. También la ministra Mercedes Aráoz debía viajar a Santiago llevando el mensaje del jefe del Estado que busca poner límite al gasto militar en la región. Obviamente, estas entrevistas han sido canceladas o están en suspenso.

Paradójicamente Chile, el país que más ha gastado en armas de última generación en América del Sur, ha anunciado que dispone de 665 millones de dólares para adquirir lanzadores Avenger, misiles Stinger y misiles aire-aire AIM. Todo esto puede interpretarse como una suerte de sarcasmo a la propuesta peruana bien recibida en otros países de la parte sur del continente que comparten la idea del presidente García que podría resumirse en la frase “menos armas dan como resultado menos pobreza”. Chile, está visto, no comparte este propósito.

¿Para qué se espía? La respuesta es obvia, porque se tiene el deseo de penetrar en los sistemas defensivos de un país, para anularlos, y eso es lo que ha venido haciendo Chile con el Perú, pese a que su poder bélico es inmensamente superior al nuestro. Todavía no sabemos los verdaderos alcances de esta operación de espionaje, pero se trataría de un hecho aislado que, aunque vincula a otros elementos militares en una red, no debe manchar el uniforme. Recordamos cómo en 1978 un suboficial FAP, Julio Vargas Garayar, fue descubierto espiando, también para Chile, y pagó su delito ante un pelotón de fusilamiento. Luego dos oficiales navales chilenos fueron sorprendidos tratando de fotografiar instalaciones de la FAP en Talara y se les expulsó del país, todo lo cual llevó a que el embajador de Chile en Lima, Francisco Bulnes Sanfuentes, fuera declarado persona no grata y tuviera que marcharse determinando la suspensión de las relaciones.

Ahora, esta nueva actitud de Chile, tipificada en el derecho internacional como hostil, debe tomarse con la ponderación y la importancia que amerita. Es posible que el embajador sureño sea convocado por nuestra cancillería para que brinde las explicaciones pertinentes, si las tiene. Paralelamente debería llamarse en consulta a nuestro embajador en Santiago y, si el ministerio de Relaciones Exteriores lo juzga conveniente, reducir el nivel de nuestra representación diplomática cerca de La Moneda.

Por otra parte, la investigación a Ariza Mendoza y a la red que operaba con él debe ser lo más exhaustiva posible, para que la Justicia Militar —la competente para estos casos— les aplique la máxima sanción de ley. En tanto, no debemos olvidar que esta historia es recurrente y se podría graficar como el peruano confiado que le extiende la mano al campesino sureño, aparentemente amistoso, pero que lleva siempre el corvo debajo del poncho.

En esta hora de afrontar con energía la traición de un subalterno, el Gobierno está, sin embargo, obligado a mantener la máxima serenidad ante las ya innegables provocaciones que viene haciendo Chile en el interés de que se produzca un incidente que detone un eventual conflicto bélico entre los dos países.

martes, 10 de noviembre de 2009

EL CAMBIO CLIMÁTICO Y LAS GUERRAS DEL FUTURO


El cambio climático será el riesgo número uno de seguridad en el siglo XXI. Políticos alemanes hacen hincapié en la necesidad de nuevos esfuerzos de distensión en el uso de recursos para evitar futuros conflictos.

Sobran los estudios e informes que advierten sobre las catástrofes que desencadenará el cambio climático en un futuro no muy lejano. Desertificación, sequía, inundaciones, pérdida de cosechas: realidades que redundarán en el desplazamiento de millones de personas en busca de su sobrevivencia, y pronóstico seguro de más tensiones políticas y sociales.

El cambio climático será "el riesgo de seguridad del siglo XXI". Las consecuencias del cambio climático afectarán principalmente a las regiones más pobres e inestables de África, Asia y América Latina donde se padecerá la falta de agua potable y la pérdida de miles de hectáreas de tierras fértiles.

Fronteras de papel


Enfocar el tema de la ecología como un factor de seguridad requiere incrementar los horizontes de análisis, pues los grandes cambios comenzarán a registrarse hacia mediados de este siglo.

Se prevé que en el año 2020, cerca de 250 millones de africanos sufrirán la falta de agua potable. Los especialistas pronostican que la temperatura global ascenderá hasta el 2100 entre 1,4 y 5,8 grados celsius frente a los niveles medidos en 1990, si no se toman las medidas pertinentes para reducir las emisiones de gases contaminantes. Un calentamiento global de 4 grados podría acabar con el 35 por ciento de las áreas agrícolas del continente negro y podría provocar el incremento del nivel del mar que cubriría los hogares de 35 millones de personas tan sólo en Bangladesh.

Era un hermoso planeta azul...

No hay capacidad de adaptación ante consecuencias de esta magnitud. La desestabilización y violencia que estallaría en las regiones afectadas haría peligrar la seguridad nacional e internacional. En el campo de la política internacional se registrarían divisiones en la lucha por agua, tierra, y por la reubicación de los millones de refugiados.

Seguridad preventiva

En el marco de la Conferencia de Seguridad de Múnich, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank Walter Steinmeier, advirtió que la protección ecológica es una cuestión de seguridad nacional e internacional.

La creación y refuerzo de fronteras difícilmente podría resolver el problema. La huida de millones conllevaría a una desestabilización de la economía mundial y los riesgos para la seguridad internacional no podrían ser confrontados de forma militar, pues en este caso no existe el "enemigo" en el sentido clásico.

El ministro Steinmeier volvió a recordar, esta vez en Berlín, que se requiere una nueva forma de política de distensión para el uso común de los recursos, con el fin de evitar conflictos y un esfuerzo conjunto por concretar la reducción de gases contaminantes hasta el 2050, tal cual fue pactado durante la cumbre del G-8 en Berlín.

El tiempo apremia indicó Steinmeier sin perder el ánimo: "Podemos lograrlo conjuntamente si todos los países participan".