viernes, 3 de abril de 2020

El nuevo coronavirus se multiplica 1.000 veces más en la garganta que el virus del SARS


La humanidad no acaba de comprender cómo un virus desconocido hace tan solo tres meses ha viajado ya por todo el planeta y ha obligado a esconderse en sus casas a miles de millones de personas. Tampoco lo entiende todavía la comunidad científica, pero un análisis exhaustivo de nueve jóvenes infectados en Alemania ilumina ahora la propagación de la enfermedad. El nuevo patógeno se multiplica mucho más y en mucho menos tiempo que su hermano, el virus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS), otro coronavirus que apareció en China en 2002 y mató a casi 800 personas antes de que una campaña internacional cortase la epidemia. La carga viral del nuevo coronavirus es mil veces superior.

Las nueve personas analizadas se infectaron en un mismo brote descubierto en Múnich el 27 de enero. El estudio no lo dice, pero por la fecha se trata de los primeros contagiados en Europa: un grupo de trabajadores de la empresa de productos automovilísticos Webasto que hicieron un curso de formación junto a una compañera china. De este mismo brote también salió el turista alemán de La Gomera que fue el primer caso confirmado en España. El seguimiento de los nueve pacientes, llevado a cabo por el médico Clemens Wendtner, muestra que el virus no solo se multiplica en los pulmones como el SARS de 2002, sino que también se replica de manera increíblemente activa en la garganta durante la primera semana con síntomas.

El equipo de Wendtner, del hospital de Schwabing-Múnich, ha analizado muestras de la garganta, de los pulmones, de los esputos, de las heces, de la orina y de la sangre de los pacientes para entender el comportamiento del nuevo coronavirus. En las personas con un cuadro leve, que fueron casi todas, los investigadores aislaron virus activos en la garganta y los pulmones solo hasta el día ocho tras el inicio de los síntomas. El pico de carga viral se alcanzó antes del día cinco. En el virus del SARS de 2002, ese pico, mil veces menor, se alcanzaba entre 7 y 10 días después del inicio de los síntomas. La diferencia es crucial, porque la potente y rápida excreción de virus en la garganta de personas con síntomas muy leves las convierte en bombas de relojería para la propagación de la enfermedad.

Los modelos matemáticos, alimentados con los patrones de movimiento de centenares de millones de chinos registrados por las empresas de telecomunicaciones, ya han revelado que hasta el 86% de los contagios al inicio de la pandemia se debieron a personas infectadas pero con síntomas leves o directamente indetectables. China, Corea del Sur y otros países asiáticos recomiendan el uso generalizado de mascarillas para evitar que estos portadores invisibles transmitan el virus. La OMS solo aconseja llevar mascarillas si se tienen tos o estornudos.

“Asusta y tiene implicaciones”, afirma la viróloga española Margarita del Val sobre el nuevo estudio, en el que no ha participado. “Ya sabíamos lo contagioso que es el virus. Aquí demuestran por qué lo es”, explica. El nuevo coronavirus y el virus del SARS de 2002 utilizan una misma puerta de entrada al organismo humano: la proteína ACE2, que se expresa en la superficie de las células de los pulmones. Es como una cerradura que los virus abren con una llave: su proteína S. El análisis alemán, publicado este miércoles en la revista científica Nature, sugiere que una mutación en esta llave permite que el nuevo coronavirus abra otra puerta: la de las células de la garganta.

“Este estudio también trae buenas noticias: no han encontrado virus activos ni en la sangre ni en la orina ni en las heces”, señala Del Val, del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, en Madrid. Los análisis de sangre de los nueve pacientes muestran que la mitad de ellos presentaban anticuerpos contra el virus en el día siete y todos ellos lo hacían el día 14. Sin embargo, según advierten los científicos alemanes, “los niveles de anticuerpos neutralizantes no sugieren una estrecha correlación con el curso clínico de la enfermedad”. La aparición de los anticuerpos —generados por el cuerpo humano para defenderse del invasor— no implica la eliminación inmediata del virus.

Los autores del estudio alertan de que las futuras vacunas enfocadas a instigar la producción de anticuerpos tendrán que “inducir respuestas muy fuertes para ser efectivas”. Margarita del Val cree que esto es un espaldarazo a la estrategia del virólogo español Luis Enjuanes, cuyo equipo en el Centro Nacional de Biotecnología trabaja para obtener una vacuna a partir de una versión atenuada del virus, capaz de desencadenar una respuesta inmune completa sin causar la enfermedad.

Algunos tipos de glóbulos blancos de la sangre producen anticuerpos para luchar contra los virus que circulan fuera de las células humanas. Otros glóbulos blancos, denominados linfocitos T citotóxicos, destruyen las propias células infectadas, convertidas en auténticas fábricas de nuevos virus. Una vez dentro de una célula humana, un coronavirus puede producir hasta 100.000 copias de sí mismo en 24 horas.

“Con una vacuna como la del grupo de Luis Enjuanes se dejaría abierta la posibilidad de que se induzca también una inmunidad celular que pudiera actuar sobre las fábricas de nuevos virus, las células infectadas, a la vez que los anticuerpos neutralizan las partículas de virus infeccioso circulante”, opina Del Val. Otro camino para desarrollar vacunas es utilizar solo determinadas proteínas del virus, pero la estimulación del sistema inmunitario podría ser insuficiente, según advierte la viróloga. Para Del Val, los nuevos hallazgos también obligan a “evaluar con cautela” el uso de transfusiones directas de plasma sanguíneo de pacientes recuperados como tratamiento experimental de los enfermos. “Habría que usar los plasmas con la mayor concentración de anticuerpos posible”, apunta.

Cuatro de los nueve pacientes de Múnich comunicaron una pérdida del olfato y del gusto, mucho más fuerte y duradera que la típica de un resfriado común. Hace ya semanas que agrupaciones médicas de varios países, como la Sociedad Española de Neurología, recomiendan el aislamiento preventivo de las personas que estos días pierden el olfato de manera repentina y sin causa aparente. Según el nuevo estudio, este síntoma podría estar relacionado con la intensa multiplicación del virus en las células del tracto respiratorio superior, desde la nariz a la garganta.

El análisis de los nueve pacientes alemanes sugiere que el virus ataca el cuerpo humano en “dos oleadas”, en palabras de Margarita del Val. La primera, concentrada en la garganta y con síntomas leves o indetectables, facilitaría la diseminación explosiva del virus. En la segunda fase, solo presente en una minoría de los enfermos, la multiplicación del virus se concentraría en los pulmones, de manera similar al SARS de 2002, con neumonías que pueden llegar a ser letales.

Dos de los nueve pacientes alemanes llegaron a mostrar indicios preliminares de neumonía. En sus esputos, el virus se mantuvo en niveles altos hasta los días 10 y 11. Según los autores, estos resultados sugieren que, en los casos leves, los médicos podrían dar el alta hospitalaria a los pacientes a partir del día 10, si la presencia de ARN del virus en sus esputos es baja. Para evitar el “pequeño riesgo residual de infectividad”, los investigadores recomiendan el aislamiento domiciliario de estas personas hasta la curación total.

Presidente Vizcarra, confirma 1,595 casos al décimo noveno día del Estado de Emergencia.

Hoy  03 de abril se cumple el décimo noveno día de emergencia nacional para frenar el contagio del coronavirus. Las últimas cifras brindadas por el Presidente Vizcarra indican que los casos de COVID - 19, desde que se anunciara el primer infectado. A la fecha se han procesado 17,334 muestras por coronavirus, dando como positivos 1,595 personas, así mismo sigue reiterando el cumplimiento de la distancia social que debe haber entre todos los peruanos y el uso obligatorio de mascarilla.

Wuhan despide a sus muertos entre la incertidumbre sobre su número

Wuhan, el foco original de la pandemia de Covid-19 en China, tiene ocho tanatorios. Sus trabajadores han incinerado los cuerpos de los 2.553 fallecidos oficialmente en la ciudad por coronavirus, y estos días se encargan de entregar las cenizas a los familiares. Un trabajo bajo un intenso escrutinio, después de que un informe de la CIA haya afirmado que las cifras oficiales de víctimas en China están muy por debajo de la realidad, y de que informaciones de la prensa local hayan denunciado que las entregas de urnas funerarias apuntan a un número mayor de muertos en esta ciudad de lo que Pekín admite.

El escrutinio es aún mayor en cuanto que el sábado llegará Qingming, el Día de Difuntos chino, en el que es tradicional barrer las tumbas y rendir homenaje a los antepasados. La costumbre es quemar dinero para consumir en el Más Allá o dejar en la tumba cosas que gustaban a los fallecidos, desde fruta a cigarrillos y alcohol. Pero este año, Wuhan tiene vetado hacerlo. La campaña de Prevención y Control de la Pandemia de Coronavirus ha prohibido los funerales para evitar aglomeraciones. En el foco original de la enfermedad, ese veto hace difícil contabilizar cuántos muertos se han procesado en sus diez semanas de cuarentena.

El tanatorio Jardín de la Tranquilidad es el mayor de todo Wuhan, una ciudad de 11 millones de habitantes en la ribera del Yangtze, el río más caudaloso de China. En el barrio de Huangpi, en el extrarradio, está rodeado de edificios por construir y solares por adjudicar. A la entrada, una banderola roja recomienda “entierros ecológicos”, beneficiosos con el medio ambiente, y no ensuciar la carretera con las cenizas de la quema de billetes de papel.

Aquí vigilan la entrada tres guardias, que tras constatar que llega prensa extranjera se convierten en nueve. Entre ellos, dos portavoces que se identifican como personal del Departamento de Propaganda local, que indican que “no es conveniente” aportar información de ningún tipo sobre los preparativos para el Día de Difuntos; o cuántas incineraciones han ocurrido últimamente; o qué recomendaciones se dan a los familiares de los fallecidos. Sí acceden a tomar una lista de preguntas para los responsables del tanatorio y responder más tarde. En otros tanatorios, la respuesta de otros funcionarios que también se identifican como del Departamento de Propaganda, será similar: no es conveniente responder.

En el cementerio de Biandanshan, el mayor de la ciudad, la respuesta es similar. El recinto, un apacible jardín en torno a una colina boscosa, está cerrado al público. El motivo, nuevamente, evitar aglomeraciones de acuerdo a la campaña de prevención y control de la epidemia. Vigilan la entrada dos vehículos de policía, varios hombres vestidos con traje protector y varias filas de barreras amarillas, las mismas que -ubicuas por todo Wuhan durante la cuarentena impuesta desde el 23 de enero y a punto de finalizar- separan los barrios y controlan el flujo de peatones.

“Solo está permitido el acceso a quienes quieran comprar tierra, a quienes quieran enterrar las cenizas de un difunto o a quienes quieran dejar en depósito esas cenizas”, se lee en un cartel, que repite casi palabra por palabra un responsable que no se identifica. Quienes quieran celebrar Qingming pueden hacerlo, sostienen las autoridades, de manera virtual en alguna de las muchas aplicaciones creadas expresamente para ello.

La susceptibilidad en torno al festejo es máxima. Un artículo de la prestigiosa revista Caixin la semana pasada ponía en duda el número oficial de fallecidos por el coronavirus en esa ciudad. Después de que, amainado ya el temporal de contagios y fallecimientos, la ciudad comenzara finalmente a incinerar los cuerpos y entregar las cenizas a los allegados (la cremación es obligatoria en China), esta revista encontró que solo en el Jardín de la Tranquilidad se entregaban al menos 2.500 urnas; otra imagen muestra 3.500 urnas, aunque no está claro cuántas están llenas. En total, un número muy superior al oficial.

En Wuhan, muchos son escépticos sobre las cifras oficiales, que indican que, además de las víctimas en la ciudad, en total han muerto en China más de 3.200 personas y se han infectado en torno a 82.000. Recuerdan la confusión de los primeros momentos, la mala gestión de las autoridades locales, lo desbordado de los hospitales en las primeras semanas y los diversos cambios de criterio en la contabilidad: solo se han empezado a registrar los casos asintomáticos desde este miércoles, entre otras cosas.

“Nadie se cree las cifras oficiales. Están intentando ocultar los errores de los primeros momentos”, cuenta Jiefu, un joven de 23 años que pasea con su novia por la calle Han, un centro comercial para las clases medias y altas inspirado en los edificios de una calle europea. Recién reabierto, se ha convertido de inmediato en el destino de muchos jóvenes que quieren recuperar ya su vida de antaño, ahora que Wuhan va a levantar por fin su bloqueo el día 8 tras dos semanas sin apenas nuevos casos.

Como Jiefu y su novia, otro joven, Harvey, de 20 años y que mira escaparates con un amigo, también cree categóricamente que las cifras que ha aportado la Comisión Nacional de Salud están muy por debajo de las reales. “Ha muerto mucha más gente, seguro”, apunta. El coronavirus pasó por su casa, lo que le da cierta autoridad para opinar: su abuela resultó contagiada. “Fue un caso leve y se ha recuperado, pero después, una vez dada de alta, ha tenido que pasar una cuarentena. Mañana, precisamente, iremos a buscarla”, apunta.

Hace un rato ha sonado el teléfono. Es el Departamento de Asuntos Exteriores de Wuhan. “Esas preguntas que hizo en el tanatorio… Me pide el Departamento de Propaganda que le diga que los responsables no han aceptado responderlas. No sé cuáles eran las preguntas”.

jueves, 2 de abril de 2020

El Pentágono releva al capitán que pidió ayuda para desembarcar un portaaviones con un brote de Covid-19


Un grupo de unos mil marineros del portaaviones nuclear estadounidense Theodore Roosevelt comenzaron el miércoles a bajar a tierra en la isla de Guam, dos días después de que el capitán del barco pidiera ayuda desesperada al Pentágono por el peligro que corren de contraer el coronavirus. En el buque hay casi 4.000 marineros encerrados con un brote de coronavirus que ya afecta a 100 de ellos. La denuncia le ha costado cara al capitán Brett Crozier. El jueves fue relevado del mando. El secretario de la Marina había expresado su descontento con la filtración de la carta.

“No estamos en tiempo de guerra. No tienen por qué morir marineros”. El llamamiento en muy duros términos de Crozier a sus jefes de la Marina para que organizaran el desembarco del Roosevelt trascendió a los medios nada más llegar la carta al Pentágono el martes. Solo una pequeña parte de los camarotes de los oficiales permitían seguir las recomendaciones de aislamiento de las autoridades sanitarias.

Algunos marineros habían podido desembarcar, pero se encontraban en cuarentena en grupos, no aislados. Crozier pedía que se habilitara el acomodamiento que fuera necesario en Guam para toda la tripulación menos un retén del 10% que se quedaría en el barco. El secretario de la Marina, Thomas Modly, dijo el miércoles que no estaba de acuerdo con esta estimación, puesto que en el barco hay armas y material sensible que necesitan estar vigilados y operativos.

El jueves, Modly anunció el relevo de Crozier como comandante del Roosevelt. “He perdido la confianza en sus capacidades”, dijo a los periodistas. Según el responsable de la Marina, Crozier se dejó llevar por sus emociones al escribir una carta en ese tono. Además, envió la carta “fuera de la cadena de mando”. El día antes, Modly había expresado su enfado con el hecho de que la carta se hubiera filtrado a los medios casi inmediatamente, pero había dicho que no habría represalias contra el capitán.

La carta, sin embargo, dio resultado. A pesar de que Modly no está de acuerdo en desembarcar al 90% de los marineros, dijo que 2.700 de los más de 4.800 tripulantes van a bajar a tierra esta semana. Más de un centenar han dado positivo por coronavirus y el propio Modly reconoció que el número final de infectados puede aumentar “en cientos”. El problema para desembarcar era la falta de alojamientos disponibles en tierra en Guam.

El Theodore Roosevelt, con base en San Diego, California, se encontraba en el Pacífico cuando se detectó el primer caso de coronavirus hace una semana. El número de infectados pasó a casi 100 durante el fin de semana pasado.

La gobernadora de Guam, Lourdes León Guerrero, había indicado que a los habitantes de la isla no les gusta la idea de que desembarquen los marineros norteamericanos, pues ya tienen sus propios casos de contagio. El Pentágono le dio garantías de que estarán completamente aislados de la población


El Ministerio de Salud informa que a la fecha hay un total de 55 fallecidos por infección del COVID - 19

El Ministerio de Salud lamenta informar el sensible fallecimiento de ocho personas por infección con COVID -19.

A  la fecha, el COVID - 19 ha provocado en el Perú 55 personas fallecidas.

Los integrantes de la Red Ambiental Amazónica Andina, expresamos nuestras más sentidas condolencias a los familiares en este momento de dolor.

Presidente Vizcarra dispone restricciones en el tránsito de las personas, y confirma 1,414 casos al décimo octavo día del Estado de Emergencia.

Hoy  02 de abril se cumple el décimo octavo día de emergencia nacional para frenar el contagio del coronavirus. Las últimas cifras brindadas por el Presidente Vizcarra indican que los casos de COVID - 19, desde que se anunciara el primer infectado. A la fecha se han procesado 16, 518 muestras por coronavirus, dando como positivos 1,414 personas, así mismo se encuentran en Cuidados intensivos 51 personas.

Se aprueba el Decreto Supremo donde se  restringe el desplazamiento de las personas a partir del día 03 de Abril de acuerdo al siguiente detalle:
- Lunes, Miércoles y Viernes   solo transitarán los Varones, y

- Martes Jueves y Sábado, solo transitarán las Mujeres, y 

- Domingo, restricción total   nadie transitará.

Este decreto supremo  será publicado en el diario el peruano hoy en la tarde.

miércoles, 1 de abril de 2020

El Ministerio de Salud informa que a la fecha hay un total de 47 fallecidos por infección del COVID - 19

El Ministerio de Salud lamenta informar el sensible fallecimiento de nueve personas por infección con COVID -19.

A  la fecha, el COVID - 19 ha provocado en el Perú 47 personas fallecidas.

Los integrantes de la Red Ambiental Amazónica Andina, expresamos nuestras más sentidas condolencias a los familiares en este momento de dolor.